- 01 de octubre de 2024
Este martes 1 de octubre, Andrés Manuel López Obrador se retiró de la vida política del país, mientras que Claudia Sheinbaum Pardo asumió la presidencia de México en los más de 200 años de historia como país independiente.
Este martes 1 de octubre, Claudia Sheinbaum escribió su nombre en la historia de nuestro país al tomar posesión como la primera mujer presidenta de México, marcando un hito en los más de 200 años de vida independiente.
En un día, la científica de 62 años y exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, asumió el poder, se despidió de su antecesor Andrés Manuel López Obrador, se reunió con mandatarios de varios países, recibió el bastón de mando de los pueblos indígenas y afromexicanos, y repasó los 100 compromisos de su Gobierno (2024-2030).
La investidura: una mujer le entrega la banda presidencial
En medio del júbilo y la emoción, la primera presidenta de México, recibió la banda presidencial -emblema del poder ejecutivo que representa la Bandera Nacional -de manos de Ifigenia Martínez Hernández, economista, académica, diplomática y lideresa del movimiento de izquierda en México, en una ceremonia que marcó el inicio de su mandato.
"Es tiempo de transformación y es tiempo de mujeres", señaló durante su primer discurso en la Cámara de Diputados de México, a la que acudieron una veintena de mandatarios internacionales y representantes de países, así como organismos multilaterales.
A lo largo de su mensaje resaltó que "por primera vez" las mujeres llegan a conducir los destinos de la nación: "Y digo llegamos porque no llego sola, llegamos todas. México es un país maravilloso, con un pueblo extraordinario, somos una gran nación".
La mandataria recibió la banda presidencial de manos de su sucesor Andrés Manuel López Obrador, en un acto que cerraron con un largo y emotivo abrazo. Posteriormente, le dedicó unas palabras y le agradeció haber luchado juntos por décadas: "Hoy lo decimos con certeza y sin temor a equivocarnos, la historia y el pueblo lo ha juzgado, es el presidente más querido ¡hasta siempre hermano, amigo, compañero Andrés Manuel López Obrador!".
Reconocimiento de los pueblos indígenas: La entrega del bastón de mando
En un zócalo abarrotado y al grito de "¡Sí se pudo!" y "¡Es un honor estar con Claudia hoy!" por parte de los asistentes, Claudia Sheinbaum recibió el bastón de mando en una ceremonia que marcó el inicio de su mandato.
La ceremonia de investidura fue dirigida por las guías espirituales Teresa Ríos, del pueblo indígena Mazateco, en Oaxaca, y Ernestina Ortiz, del pueblo Otomí, en el Estado de México, quienes llevaron a cabo un ritual de purificación con hierbas y humo de copal, como se acostumbra desde las civilizaciones prehispánicas.
El acto de entrega del bastón de mando se llevó a cabo en representación de los 70 pueblos indígenas y el pueblo afromexicano como símbolo de fuerza, energía y sabiduría colectiva de las comunidades.
"Nuestras abuelas y abuelos nos enseñaron que el bastón de mando representa el poder político y espiritual, así como lo más sagrado de nuestra cosmovisión. Es símbolo del poder comunal, del noble don de servir al pueblo y de hacer justicia", concluyeron las guías espirituales.
El discurso en el Zócalo: las 100 promesas del Gobierno de Sheinbaum
"Amigas, amigos: el día de hoy inicia el segundo piso de la Cuarta Transformación de la vida pública de México. La primera transformación fue La Independencia: la segunda, La Reforma; la tercera, La Revolución Mexicana; la cuarta, fue iniciada por el mejor presidente de México, Andrés Manuel López Obrador".
Ante un Zócalo abarrotado en el primer día de su mandato, cerca de 400 mil personas se dieron cita en el primer cuadro de la capital para escuchar y dar la bienvenida a la presidenta en el primer acto masivo de su sexenio.
Después de recibir el bastón de mando de manos de mujeres representantes de pueblos indígenas en una ceremonia solemne. La mandataria enumeró un centenar de propuestas que pondrá en marcha a lo largo de su sexenio, descritas por ella misma como "el segundo piso de la Cuarta Transformación".
Entre los primeros puntos destacó que su Gobierno se enfocará en la búsqueda de los jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa —aunque no mencionó a las Madres Buscadoras de México—, y señaló que se someterá al proceso de revocación de mandato para el año 2027.
Además, anunció la homologación del tipo penal de feminicidio en todos los Estados, la creación de la Secretaría de las Mujeres, de la Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno; y la búsqueda de un acuerdo para alcanzar la semana laboral de 40 horas.
"Vamos a gobernar con los principios de la Cuarta Transformación. Por el bien de todos, primero los pobres... Con el pueblo de todo, sin el pueblo, nada". El medio ambiente, la tecnología que se produce en México, las energías renovables y el impulso a los transportes ferroviarios también han sido parte de su discurso.
La mandataria aseguró que, al igual que su predecesor, no vivirá en la residencia de Los Pinos, ni restablecerá el Estado Mayor Presidencial, pero sí continuará con las conferencias matutinas y las visitas a los Estados durante los fines de semana.