NETFLIX ESTRENA UNA SERIE SOBRE SU VIDA
Ayrton Senna, el ídolo de las pistas que corre después de su muerte
Este año se cumplen dos hitos relacionados con Ayrton Senna: 30 años de muerte y el estreno de una serie sobre su vida.
En 1994 el Gran Premio de San Marino, en el circuito de Imola, fue una pesadilla que terminó con la muerte de Ayrton Senna, el héroe latinoamericano de la Fórmula 1, el fenómeno global en un mundo que empezaba a serlo.
Ese fin de semana ocurrieron tres tragedias para el mundo del automovilismo: casi fallece el brasileño Rubens Barrichello al chocar contra el muro; el austríaco Ronald Ratzenberger perdió la vida cuando su automóvil se estrelló, y el también brasileño Ayrton Senna voló hacia la eternidad.
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Senna, nacido en Sao Paulo en 1960, terminaba su vida en la curva de Tamburello, en un charco de sangre, ante los esfuerzos infructuosos de los médicos. Comenzaría, sin embargo, la otra vida: la de la celebridad de las pistas, la de la nostalgia por lo que no pudo hacer, la del ídolo que es llorado 30 años después.
De brasileño a brasileño
Netflix cuenta la historia de Senna en una miniserie de época que se estrenará este viernes 29 de noviembre. Lo interpreta el actor y músico brasileño Gabriel Leone, que se ha confesado como un fanático del deporte.
Son seis episodios en los que se retrata el inicio de la carrera del piloto. Su experiencia en el karting fabricado por su padre, su mudanza a Inglaterra. Sus victorias, sus tres premios. La rivalidad con el piloto Alain Prost. Y la tragedia del 1 de mayo de 1994.
Como lo contaron medios de comunicación, para la serie se convirtió el autódromo de Buenos Aires en varios circuitos de automovilismo, y se hicieron réplicas de los automóviles.
El carismático
En 1988 Senna logró su primer título mundial con McLaren. La rivalidad con su compañero de equipo, Alain Prost, era conocida públicamente y también marcó la Fórmula 1. El segundo título lo consiguió en 1990, para repetir en 1991. Era un piloto muy hábil bajo la lluvia.
El 1 de mayo de 1994 se rompió la barra de dirección del automóvil que pilotaba el brasileño, por lo que siguió recto por la curva Tamburello a más de 200 kilómetros por hora.
Durante años se dijo que la muerte de Senna ocurrió por la barra de suspensión. Pero el 1 de mayo de este año, en una entrevista con O'Globo, el médico Alessandro Misley, miembro del equipo de rescate del Autódromo Enzo e Dino Ferrari en los años 90, contó algunos detalles de su fallecimiento.
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Como lo recoge La Nación, "la muerte de Senna se produjo por una fractura en la base de su cráneo, debido al fuerte impacto provocado por la desaceleración. La lesión por barra de suspensión es secundaria y no letal. Si fuera sólo eso, Senna estaría vivo".
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